Recordemos el
nombre de todos nuestros compañeritos de primer año de colegio o toda la lista
del pedido del mes para el supermercado, o incluso algo más repasado… la
materia de último año. ¿Lo logró en su 100%? Probablemente no, pero descuide,
es normal, pues se ha establecido que olvidamos de manera ordenada de acuerdo a
unos principios establecidos.
Existen
distintas teorías que explicarían nuestra dificultad para recordar hechos o
alguna información. Podemos olvidar por diferentes razones, una de estas
corresponde al:
1.- Olvido motivado por la represión: Este material, almacenado en la MLP, es olvidado puesto que
nos traería un beneficio personal en no recordar, como evitar la ansiedad o
magnificar el pasado
manteniendo únicamente recuerdos positivos que reflejen una imagen ideal de sí
mismo.
2.- Decaimiento del trazo de memoria: Se cree que existiría una dificultad en la recuperación del
material de información alojado en la MLP. Entonces la pregunta crucial sobre
los olvidos no motivados es si olvidamos porque la memoria del hecho se
deteriora, o porque aunque la memoria de éste permanezca, posiblemente durante
toda la vida, no podamos llegar a él para recuperarlo.
Algunos teóricos
sostienen que el olvido es debido a la dificultad de recuperación. Mientras que
otros psicólogos opinan que el trazo de memoria (huella o rastro que el
aprendizaje deja en el sistema nervioso) persistirá mientras sea utilizado,
pero desaparecerá con el tiempo si no se usa.
Algunas razones
para que se produzca el decaimiento de memoria son:
- Percepción pobre: impresión
débil. Lo percibido, por diferentes factores, no se conserva en la memoria. A
esto le afectan factores externos (ruido, etc.) y factores internos
(distracción).
- Imposibilidad de repasar:
Aplicable sólo a la memoria a corto plazo.
3.- Interferencia
De acuerdo a
este factor, la razón por la cual olvidamos es que otra información, aprendida
antes o después, interfiere nuestros recuerdos. De este modo puede ocurrir que,
en la memoria a corto plazo, algún material similar a lo que queremos recordar
nos impide repasar la nueva, y finalmente olvidamos; mientras que en la memoria
a largo plazo, se pueden dar dos procesos de interferencia:
- Interferencia proactiva (IP):
Describe una situación en la cual la información que se aprendió con
anterioridad interfiere con la habilidad para recordar la información nueva.
- Interferencia retroactiva (IR):
La información que aprendemos después produce una barrera de memoria que
interfiere el recuerdo del material aprendido previamente.
4.- Fallo en la recuperación
Se produce un olvido
dependiente de las claves, es decir, dependemos de las claves que nos ayudan
para la recuperación y, cuando estas no están presentes, el recuerdo es
inaccesible.
El psicólogo cognitivo Endel
Tulving sostiene que cuando se les proporcionan, a las personas, las claves de
recuperación adecuadas para aprender algo por primera vez, esas les ayudarán a
recordarlo más tarde. Esas claves pueden ser palabras asociadas, significados,
agrupación, etc.
Escrito por: Natalia Castillo.
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